Después nos dirigimos al puente de San Pedro por una maravillosa carretera llena de curvas
De allí fuimos a Zaorejas donde se encontraba el hotel que nos alimentaría y daría cobijo durante el fin de semana.
Por la tarde después de una siesta reparadora salimos a dar una vuelta por el bonito pueblo de Zaorejas
De regreso cena en el hotel y alguna copa hasta la madrugada. Por la mañana tocaba senderismo, preguntamos en el hotel y nos aconsejaron que nos internáramos por un camino que salía de la plaza nueva
Una amplia fuente y abrevadero de ganado nos salió al paso
Al final llegamos a lo que queda de un acueducto romano, que al parecer sirvió para llevar agua al pueblo
Después de comer hicimos las maletas e iniciamos el regreso a casa.
Ha sido un fin de semana genial, con un hotel más que correcto en una zona de ensueño. ¡¡Lo hemos pasado realmente bien!!